Pase a toda velocidad a través de las nubes del centro de la ciudad y caí con un fuerte golpe en el congelado suelo de lo que debió haber sido una plaza. Cuándo me levante me puse a pensar dónde podía encontrar a Batman. Hice lo más logico: ir a su mansión. Fui caminando, viendo por dónde pisaba rumbo a la Mansión Wayne.